El «Plan de Guerra Rojo» permaneció clasificado hasta 1974.

Yo usualmente me opongo a la guerra o a la violencia armada, el gasto suele ser innecesario y creo que debe ser la última opción excepto en casos muy extremos (como los terroristas islámicos, los grupos como FARC o Sendero Luminoso y las dictaduras opresivas comunistas que no abandonarán el poder por las buenas). Este fue uno de ellos, imagínese que usted tiene muchos hijos hambrientos en su casa, su esposa no tiene que comer y usted tampoco, sin embargo, su vecino le debe una cantidad asombrosa de dinero que al parecer nunca le pagará y mientras el come todos los días muy bien y usted insiste por las buenas el simplemente se hace la vista gorda, ¿tiene usted derecho a ir por la fuerza a reclamar lo suyo?, en este caso: ¿Estaría bien si usted entra con un fusil armado en la propiedad de su vecino sólo para darle una advertencia?, en Venezuela le decimos a eso: «Mostrar los dientes», es una especie de estrategia infantil para evitar que lo tomen a uno por débil, el problema es que muchas cosas pueden pasar y usted no sabe como responderá el vecino realmente;

Gran Bretaña fue salvada por Hitler. Almenos de cierta forma. Aunque suene raro el ascenso de los nazis al poder en la Alemania de los años 30 y la posterior invasión de Polonia supuso un freno para un plan de guerra secreto de Estados Unidos que en aquella época tenía como objetivo invadir Gran Bretaña. Era el plan secreto conocido como Red War Plan (Plan de Guerra Rojo).

Desarrollado durante la década de los 20, se aprobó en mayo de  1930 por los Secretarios de Estado de la Guerra y la Marina (equivalentes al Ministro de Defensa) de los Estados Unidos de América y planeaba realizarse en algún momento entre 1930 y 1936.

Porque, por difícil que parezca imaginarlo hoy, no había una ‘amistad especial’ entre los Estados Unidos y el Reino Unido antes de la Segunda Guerra Mundial. De hecho, había cierta riña con bases históricas.

Cuando Estados Unidos entró en la Primera Guerra Mundial en 1917, luchó como una potencia asociada, no como un aliado británico. Al final de la guerra, los otros aliados incumplieron el pago de sus deudas con Gran Bretaña. Los británicos le debían a Estados Unidos £ 9 mil millones (o 14 mil millones de dólares, mucho dinero ahora, pero aún más dinero en ese entonces). Estados Unidos exigió el reembolso, lo que empañó la imagen de Estados Unidos en Gran Bretaña. La imagen estadounidense de los británicos, a su vez, era de una nación desagradecida que quería hacerse la vista gorda de sus deudas de guerra, no querían devolverle a los americanos lo que con tanto esfuerzo habían sacado de sus bolsillos e impuestos.

En la década de los 20, ya finalizada la Iª Guerra Mundial (por entonces era la Gran Guerra). EEUU se sumía en la Gran Depresión que les costó casi el 70% de su economía y el hambre se hizo común en el país de la libertad, al percatarse de la enorme deuda que Inglaterra se rehusaba a pagar la prensa alimentó un sentimiento antibritánico, el gobierno de entonces debía hacer algo, era muy impopular.

El Gobierno USA aprobó en 1930 una partida de 57 millones de dólares que servirían de preparación para dicha guerra. Se construyeron tres aeródromos militares camuflados como aeropuertos civiles cerca de la frontera canadiense pues el plan incluía una primera avanzadilla sobre los vecinos del norte neutralizando su ejército y devastando su industria como paso previo a la invasión británica por parte de un ejército con 6 millones de efectivos.

La estrategia de la invasión contaba con el asesoramiento del héroe transatlántico Charles Lindbergh en lo referente a la parte aérea y del general Douglas “volveré” MacArthur en cuanto al plan de bloqueo naval de las islas británicas.

Pero ese no era el único plan que se pergeñaba en Estados Unidos para hacerse respetar en el mundo con todos quienes les debían dinero (o quienes parecían comenzar a crecer mucho como para hacerles frente). Si la invasión a la pérfida Albión era el Plan de Guerra Rojo, también existían un Plan Verde para invadir México, un Plan Naranja con objetivo en Japón, un Plan Amarillo centrado en China e incluso un Plan Blanco destinado a combatir una hipotética Segunda Guerra Civil estadounidense.

Estoy seguro de que EEUU tiene muchos más planes bajo la manga, un ejército tan poderoso debe estar en control de cualquier hipótesis, supuesto y nada puede cogerlo por sorpresa, como decía hace 2.400 años Vegecio, si quieres la paz, prepárate para la guerra, frase que dio origen al nombre de la munición Parabellum.