Viví durante 8 meses en Bogotá, una ciudad fantástica en dónde atesoro muy buenos recuerdos. Una vez conversando con una «rola», me comentaba que «los músicos venezolanos están invadiendo a Colombia«, en ese momento no existía la grave crisis migratoria que tenemos ahora, esta amiga decía que debido a que agrupaciones musicales como Caramelos de Cianuro, Oscar de León y Chino y Nacho sonaban en todos las radios entonces debía haber alguna suerte de alianza para destruir a la industria musical local. ¿Era un simple comentario de cantina o en realidad detrás de este comentario se ocultaba el miedo a lo extranjero y la envidia por el éxito ajeno característico de las sociedades latinoamericanas?

El hecho de que la música rock de un país le guste a mucha gente no quiere decir que los músicos de rock de dicho país tengan una conspiración para destruir los demás géneros musicales locales de esa región, sino que el mercado los prefiere, y esto cambia con el tiempo, quizá ya nadie escuche esto en Colombia para el día de hoy, esta explicación simple no cabe dentro de la cabeza del Marxista, en donde todo se reduce a oprimidos y opresores.

El miedo que tienen los marxistas y sus adeptos a la «americanizacion» del planeta y su tendencia a satanizar las virtudes de la actividad empresarial y el emprendimiento global es mas una paranoia ideológica que una realidad.

No hay duda que con la globalizacion, el inglés por ejemplo se ha convertido en un lenguaje importante de nuestros tiempos, como fue el Latín en las épocas Medievales. Y lo es no porque haya sido «impuesto por el imperio» sino porque es un instrumento indispensable para las transacciones comerciales internacionales y para las comunicaciones.

La creciente interdependencia del mundo, el Internet y el desvanecimiento de las «fronteras nacionales» ha creado incentivos para las nuevas generaciones de aprender y asimilar nuevos idiomas y culturas. No como un hobby sino como una necesidad. De hecho ya se hace evidente que hablar varios idiomas y navegar cómodamente entre diferentes culturas y ambientes se ha vuelto crucial para el exito profesional en nuestro mundo globalizado de hoy.

Es cierto que la globalizacion hace que mediante la modernizacion – instinto natural en el hombre – muchas formas tradicionales desaparezcan PERO al mismo tiempo le abre la puerta y crea las oportunidades que constituyen un paso «hacia adelante» de toda la sociedad en general lo contrario es cerrarse en si mismo como Cuba, Corea del Norte o mas recientemente Venezuela. ¡La globalizacion nos ha demostrado que siempre ayudara a expandir y hacer populares (de común uso) las mejores practicas de cada lugar si detrás de ellas hay una gran riqueza cultural!

Quienes alegan que la globalizacion podría destruir los modismos humanos históricos conocidos muchas veces como «identidad cultural de los pueblos» revelan una concepción estatal de ver al mundo, una concepción que no tiene bases historicas. ¿Que culturas y manifestaciones culturales han permanecido completamente inertes e idénticas durante el paso del tiempo?, si queremos encontrarlas debemos trasladarnos a la Amazonas Peruana o a la Tundra del Africa e ir a las comunidades mágicas-supersticiosas que viven en cuevas, adoran al sol, a la luna y a las bestias, cometen sacrificios humanos, comen todos del mismo plato y que debido a su primitivismo suelen ser vulnerables a las enfermedades, al exterminio y la explotación.

Todas las demás culturas, particularmente aquellas que tienen el derecho de llamarse «modernas» (aquellas que estan vivitas y coleando) han evolucionado al punto de ser no mas que un remoto reflejo de lo que fueron hace tan solo 3 o 4 generaciones atrás. Esta evolución puede apreciarse en países como Francia, España e Inglaterra, donde los profundos cambios en los últimos 50 años han sido tan espectaculares y tan profundos que a un Marcel Proust, a un Federico Garcia Lorca o a una Virginia Woolf se les haría muy difícil reconocer hoy en día las sociedades en las que nacieron.

Esa noción de «Identidad Cultural del Pueblo» es nociva, nefasta… peligrosa para el individuo.

He viajado extensamente por América Latina y los ingredientes sociales, culturales, rítmicos, culinarios, étnicos que constituyen a Latinoamerica nos enlaza con prácticamente la mayoría de las culturas y regiones del mundo, somos la mezcla de lo mejor (y lo peor) que todos tienen por ofrecer, o mejor dicho, tenemos tantas identidades culturales que es como no tener ninguna y esto para mi – contrario a lo que piensan los nacionalistas – es nuestra mayor riqueza, el mejor tesoro que tenemos.

Yo estoy de acuerdo en que un grupo de familias que habla el mismo lenguaje, nacieron y viven en el mismo territorio, tienen rasgos raciales similares, practican la misma religión y tienen las mismas costumbres pudiesen tener mucho en común, ¡claro que si!

Pero aún con todas esas características en común, el «denominador COLECTIVO» nunca podrá definir totalmente a cada uno de esos individuos únicos, originales y diferentes. Por el contrario ese denominador busca abolir o relegar a un segundo plano la suma de tratos y atributos únicos que diferencian a un miembro del grupo de los demás. Una de las cosas que buscamos promover en La Sociedad Bastiat (American Institute for Economic Research’s The Bastiat Society of Venezuela) es que la globalizacion se extiende por completo y radicalmente hasta cada individuo por separado y le da la posibilidad de construir el mismo su propia «identidad cultural» a través de la acción voluntaria, de acuerdo a sus preferencias y sus mas intimas motivaciones. Es decir, hoy en dia (lo cual no sucedía en el pasado), los ciudadanos ya no están obligados a respetar por completo una identidad que los atrapa en un campo de concentración – en donde se le imponen sin escape el lenguaje, la nación, la religión y las costumbres – y es por esto que la globalizacion debe ser bienvenida, porque se trata de LIBERTAD.

** No entendemos a la GLOBALIZACIÓN como a la ideología de izquierda del GLOBALISMO. A quién dedicaré una entrada próximamente.