En esta época, donde los hombres no desarrollan virtudes, a menudo carecen de valentía, humildad, generosidad y otros valores caballerescos. Rescatar estos principios es esencial para cultivar líderes empáticos, resilientes y éticos que guíen a la humanidad hacia un futuro más libre, justo, compasivo y esperanzador.

Debemos rescatar estas enseñanzas de los caballeros medievales, su valentía, creencias y vida sacrificial son un perfecto modelo para EL HOMBRE OCCIDENTAL. Un hombre de carácter y auto-control, cuyas convicciones dominan sus emociones, cuya mente domina su cuerpo. Timoneles de mente sólida en aguas de realidad liquida.

Anteriormente puse a tu disposición los Libros de Caballería más reconocidos. Hoy quiero compartir las 9 Aristas del Diamante que un Caballero Medieval debía pulir. Son las grandes virtudes cristianas de la caballería.

Las 9 Virtudes del Rey Arturo

I) VALOR: Más que bravuconería o alarde, un caballero debe tener el coraje en el corazón para luchar batallas que son difíciles, agotadoras o poco glamorosas, y aceptar con gracia los sacrificios involucrados. Cualquier hombre que sea portador de luz debe soportar la quemadura.

II) FUERZA: Cada caballero tiene sus propias fortalezas dadas por Dios. Estas deben ser desarrolladas a diario, ya que un caballero ganará más al trabajar en sus fortalezas que al intentar mejorar sus debilidades. El caballero es consciente de sus debilidades pero trabaja diariamente para desarrollar sus fortalezas.

III) DOMINIO PROPIO: Todo es permitido, pero no todo es beneficioso. El caballero templado sabe abstenerse de ciertas cosas y mantiene todas las cosas con moderación. A través del dominio propio y el control mental, el caballero crea para sí mismo una isla que ninguna tormenta puede arrasar.

IV) HUMILDAD: No todas las batallas pueden ser ganadas. En las batallas perdidas, el caballero que falla aprende humildad y las habilidades prácticas necesarias para ganar futuras peleas. El caballero humilde sabe cuándo retirarse para restaurarse. La derrota humilla pero la humildad nos engrandece.

V) PACIENCIA: Una mente apresurada va rumbo al matadero. Hay confusión en la rapidez. No puedes ver con claridad ni escuchar correctamente. El caballero paciente está dispuesto a esperar y hacer del tiempo su aliado. Hay un momento para la acción y con una mente clara ese momento se hace obvio.

VI) MISERICORDIA: Nunca se ataca por la espalda. Nunca se ataca si el adversario está desarmado y sin armadura. Las palabras y actitudes son armas peligrosas; una herida infligida por una flecha se cura, pero una herida infligida por palabras duras se arraiga en el corazón. Así, el caballero misericordioso ejerce la compasión en sus tratos con los demás. Todos necesitamos dar perdón y todos necesitamos ser perdonados.

VII) GENEROSIDAD: El tesoro de un caballero no es solo suyo; es suyo para cultivar y dar en el momento y de la manera correcta; porque un verdadero caballero gana todo lo que puede, ahorra todo lo que puede y da todo lo que puede. Para un verdadero caballero, la riqueza es solo un recurso. Es una herramienta para lograr el bien y convertirse en la mano invisible pero trabajadora de Dios en su comunidad, causa y propósito en la vida.

VIII) NOBLEZA: Se mantiene fiel a sus ideales nobles aún cuándo nadie lo ve. Los hombres de mente baja están ocupados únicamente con las apariencias, pero el caballero de mente noble sostiene por sus convicciones en todo momento, especialmente cuando nadie más está mirando. Le preocupa más lo que Dios piense de el que lo que piensen los demás. La nobleza del caballero le brinda honor.

IX) ESPERANZA: En la hora de la adversidad, el buen caballero no está sin esperanza, ya que sabe que las noches oscuras son seguidas por días brillantes; así que los tiempos de amargo sufrimiento son seguidos por temporadas de dulce prosperidad. La esperanza está siempre presente en la perspectiva positiva y el comportamiento alegre del Caballero.

Este material fue inspirado en el siguiente video en inglés: